Durante siglos ha funcionado como una gigantesca esponja natural, tomando agua de unos puntos para distribuirlo en otros. Este régimen, sin embargo, se ha visto radicalmente alterado en los últimos 30 años, en los que se han perdido mas de 30.000 ha de zonas humedas, debido a los usos agrícolas y a los descensos de nivel del acuífero. Estos cambios han afectado de manera especial a las Tablas de Daimiel, que tienen su origen en los desbordamientos del Guadiana y el Cigüela , y que se nutrían además de las aguas subterraneas emergidas en los Ojos del Guadiana. El aspecto que ofrece el Parque actualmente es el de una mancha húmeda alargada, con multitud de islas (menores de 50 ha), zonas de aguas libres y de espesa vegetación entremezcladas, formando un laberinto. Las especies vegetales acuaticas dominantes son Zannichellia pedunculata, Cerathopylum submersum, Ruppia maritima y Chara aspera. Abundan tambien los carrizales y espadañales, que han ido desplazando a los antaño comunes masegones. En las islas aparecen tarajes, sauces y álamos. Durante el invierno, se han llegado a registrar en las Tablas de Daimiel grandes concentraciones de anátidas. Entre ellas, ánade friso, ánade silbón, ánade real y pato colorado. Cuando el nivel de agua es lo suficientemente alto, tambien se reproducen en la zona la garza imperial, martinete, zampullin cuellinegro, zampullin chico, somormujo lavanco y aguilucho lagunero. Las especies de peces mas frecuentes son la carpa y la gambusia, habiendo reemplazado el cangrejo americano al cangrejo autoctono, abundante en otros tiempos. Entre los reptiles de los que se han citado 13 especies, destacan los galápagos europeo y leproso. Los mamiferos no son abundantes, aunque están presentes la nutria, la comadreja y la rata de agua. |