Descubrimiento: en 1868 por Jannsen y Lockyer
Número Atómico: 2
Estructura electrónica: 1s2
Números de oxidación: 0
Usos: Gas de globos y dirigibles. En estado líquido, debido a que presenta la temperatura más baja de ebullición y no solidifica a menos que se someta a presión, se emplea como líquido para enfriar y para el estudio de la superconductividad y otras actividades criogénicas. Gas inerte en soldadura de arco. Gas de túneles de viento supersónicos. Presurización de depósitos de combustible líquido de cohetes.

Es el segundo elemento más abundante del Universo. En la Tierra hay trazas en minerales de uranio (como producto de desintegración) y en el gas natural (en la atmósfera hay 5 ppm), (representa un 0,0000008% en peso de la corteza) pero es abundante en las estrellas más calientes, siendo importante en las reacciones que producen energía en el sol y las estrellas. La fusión de hidrógeno para dar helio proporciona la energía de las bombas de hidrógeno.
Jannsen obtuvo la primera evidencia del helio durante el eclipse solar de 1868 al detectar una nueva línea en el espectro solar. Lockyer y Frankland sugirieron el nombre helio (helios = sol) para este elemento.
Es la sustancia con menor punto de fusión y, por su bajo punto de ebullición (próximo al cero absoluto), se emplea como refrigerante y en el estudio de la superconductividad. Tiene otras propiedades peculiares: es el único líquido que no puede solidificarse bajando la temperatura. Permanece líquido en el cero absoluto a presión ordinaria, pero puede solidificarse fácilmente incrementando la presión (a 26 atmósferas).